Cuando se reside en Estados Unidos pero no se es ciudadano, la posibilidad de deportación es una perspectiva aterradora. Incluso si actualmente tiene permiso de trabajo, la falta de un estatus que garantice la residencia permanente puede dejarle vulnerable, especialmente en el clima político actual.
La expulsión puede tener consecuencias angustiosas, como la separación a largo plazo o incluso permanente de su familia y amigos aquí. En algunos casos, puede significar su regreso a un país donde se enfrenta a daños o persecución. Si se inicia un procedimiento de expulsión, tiene diferentes opciones para defenderse, cuatro de las cuales se explican a continuación. La más adecuada para usted dependerá de su situación específica.
El ajuste de estatus es el proceso mediante el cual un no ciudadano puede solicitar la residencia permanente mientras se encuentra en EE.UU. Si usted es hijo, cónyuge o padre de un ciudadano estadounidense, puede evitar su deportación solicitando el cambio de estatus a residente permanente.
La cancelación de la expulsión significa que su orden de deportación se detiene, aunque sólo sea temporalmente. Si usted es un residente permanente legal, también conocido como titular de una tarjeta verde, usted puede ser elegible para esta forma de alivio de deportación si usted tiene:
Si no es titular de una tarjeta verde, sólo puede solicitar la anulación de la expulsión si
Si vino a Estados Unidos huyendo de la persecución en su país de origen, es posible que pueda solicitar asilo si puede demostrar que el peligro sigue existiendo. La ley de inmigración de Estados Unidos ofrece ciertas protecciones a quienes temen sufrir daños por su:
La mayoría de las solicitudes de asilo se presentan en el punto de entrada en Estados Unidos y normalmente se aplica un plazo de un año, pero es posible que pueda solicitarlo si puede demostrar que circunstancias inusuales le impidieron hacerlo dentro de ese plazo.
Si no reúne los requisitos para el asilo, la retención de la expulsión puede ser una opción si puede demostrar que su vida o su libertad estarían en peligro por motivos de raza, religión, nacionalidad, opinión política o pertenencia a un determinado grupo social en caso de que se viera obligado a regresar a su país.
El nivel de exigencia de la prueba es más alto que en una solicitud de asilo: debe demostrarse que es "más probable que no" que vaya a ser perseguido, mientras que con el asilo sólo debe tener un "temor fundado".
Si usted vive en el Sur de California y ha recibido un Aviso de Comparecencia ante un juez de inmigración, póngase en contacto con Karlin & Karlin, APLC, inmediatamente. Hay muchas posibles defensas de deportación, pero la ley que rodea a cada uno es compleja, y tenemos la experiencia y las calificaciones para guiarlo a través de sus desafíos de inmigración. Ofrecemos consultas gratuitas, así que póngase en contacto con nosotros y permítanos ayudarle.
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