3 lesiones frecuentes al nacer

Un niño lesionado al nacer puede ser un momento muy angustioso y difícil.

Sin embargo, es crucial que los nuevos padres comprendan que muchas lesiones en el parto son evitables y que a veces se producen por negligencia médica.

Los médicos tienen el deber de atender a todos los pacientes y son responsables de proporcionar la mejor atención posible, así como de prever las cosas que pueden ir mal. Sin embargo, los médicos no siempre admiten sus errores, por lo que es vital que los nuevos padres conozcan los tipos más comunes de lesiones en el parto evitables y que interpongan una demanda contra el médico o el hospital si desean recibir una indemnización.

Lesiones cerebrales traumáticas

Una lesión cerebral traumática sufrida al nacer puede ser grave y causar complicaciones de por vida al niño. Este tipo de traumatismo puede producirse durante el parto y dar lugar a una falta de oxígeno en el cerebro y a complicaciones como:

• caput succedaneum
• cefalohematoma
• deformidad normal de la cabeza
• hemorragia subgaleal
• hemorragia subdural
• hemorragia subaracnoidea
• hemorragia epidural

Los traumatismos cerebrales suelen estar causados por negligencias médicas. Si el traumatismo cerebral se debió a una negligencia médica, los padres tienen derecho a reclamar al hospital para que les ayude a recuperar los gastos de atención médica del niño.

Fracturas óseas

Por desgracia, pueden producirse fracturas óseas durante el parto o inmediatamente después, y aunque es improbable que este tipo de lesiones causen complicaciones de salud a largo plazo, puede haber motivos para reclamar si se producen por negligencia. La piel y los huesos de un recién nacido son muy frágiles, y si los médicos o el personal de enfermería no tratan al bebé con el cuidado adecuado, podrían causarle fracturas o fracturas de huesos. Es responsabilidad de los médicos asegurarse de que los bebés a su cargo no sufren daños evitables que podrían haberse evitado de no ser por un error humano.

Lesión del plexo braquial

Las lesiones del plexo braquial afectan a la red nerviosa responsable del control muscular y la sensibilidad en el hombro, el brazo, el antebrazo, la mano y los dedos. Es posible que se produzca una lesión que afecte a estas partes del cuerpo y les impida funcionar como deberían. Este tipo de daño es más probable si el parto es de nalgas, si el parto es largo, si los hombros del bebé son demasiado anchos para pasar por el canal del parto o si el cuello del bebé está estirado hacia un lado. Si los nervios se dañan, no pueden transmitir las sensaciones con normalidad y los movimientos musculares pueden debilitarse. Un niño con este tipo de lesión puede requerir cirugía correctora, y cuanto antes se diagnostique, más positivo será el pronóstico.

Si cree que su hijo ha sufrido una lesión en el parto debido a una negligencia médica, la ley le garantiza el derecho a exigir responsabilidades a los profesionales sanitarios. Para obtener más información sobre sus derechos y cómo iniciar el proceso, póngase en contacto hoy mismo con los abogados expertos en lesiones en el parto de Karlin & Karlin en 213-348-7281 para una consulta gratuita y confidencial y averiguar cómo podemos ayudarle.